El Kit Digital está dirigido a autónomos y empresas con domicilio fiscal en España, abarcando desde trabajadores por cuenta propia hasta medianas empresas de hasta 250 empleados. El programa se estructura en cinco segmentos según el tamaño de la empresa. Cada segmento tiene asignado un importe máximo de ayuda, que varía entre 3.000 y 29.000 euros, dependiendo del tamaño de la empresa.

Pueden beneficiarse del Kit Digital las pequeñas empresas, microempresas y personas en situación de autoempleo cuyo domicilio fiscal esté ubicado en territorio español. Las ayudas están disponibles para empresas de diferentes tamaños, con cuantías que varían según el número de empleados. Desde autónomos hasta medias empresas de 250 empleados.

El plazo máximo para resolver y notificar la resolución del procedimiento de concesión de la ayuda es de seis meses, contados desde la fecha de finalización del plazo de presentación de solicitudes.

Sí, el Kit Digital es compatible con otras ayudas, como el Kit Consulting. Uniendo ambas ayudas se puede conseguir la implementación de soluciones digitales que permitan un proyecto más completo.

La principal diferencia está en el enfoque de las ayudas. El Kit Digital subvenciona la adquisición e implementación de soluciones digitales específicas, como software de gestión o presencia en internet, mientras que el Kit Consulting financia los servicios de asesoramiento especializado para que las pymes diseñen su hoja de ruta hacia la transformación digital. Ambos programas son complementarios.

Si no se utiliza la totalidad del bono del Kit Digital, simplemente se pierde la parte no utilizada. La empresa no recibe ni paga nada por el importe no gastado, ya que el bono se abona directamente al agente digitalizador por los servicios contratados.

Una vez concedido el bono digital, el beneficiario dispone de un plazo de seis meses para formalizar el acuerdo de prestación de soluciones con un agente digitalizador. Si no se formaliza en ese periodo, se pierde el derecho a la ayuda.

El Kit Digital es una subvención a fondo perdido y no se debe devolver siempre que se cumplan las condiciones del programa y se justifique adecuadamente el uso de los fondos. Sin embargo, en caso de incumplimiento de las obligaciones establecidas, como no implementar las soluciones contratadas o no justificar correctamente el gasto, se podría requerir la devolución total o parcial de la ayuda.